Lydia dice que no se viene a comer con nosotras a la Peña la Platería que se va pa su pueblo.
Pero dejo constancia de que estuvo: el chico que sabe tejer le ha hecho una bufanda calentita calentita (y la mar de bonita)
Daban soponcios na más tocarla, pero ella está como loca por estrenarla.¡No le queda ná!
A la Peña, en San Juan de los Reyes ya al final cerca del Chapiz, llegamos con los vestidos arrugados del sudor...tremendo. Y Alba que dice que nos sentemos fuera por las vistas. La nena...
Con Ingrid y Alba, mis compis de curro esta primavera. Y Lydia, claro.
Y bajando, bajando por la sombrita nos encontramos esto en Plaza Nueva. Sus autores nos explicaron lo que era: un mandala árabe (podías adivinar el dibujo pero faltaba perspectiva y altura claro) que simulaba cócteles molotov en cada botella. En cada cóctel un deseo:
cócteles de té
Como no me resistía, me volví para hacerle una foto a los autores. Les pedí permiso, les dije que era para mi blog, que escribiría de ellos. Y ellos encantandos dijeron que sí. Y yo les dije que qué bien que la gente dijera que sí (hace unos días tuve una experiencia traumática con dos señoras en Madrid por una mierda de foto que no eché porque no me dejaron y el de al lado mío pumba, la echó y punto, terrible).
Los artistas:
chicos de Bellas Artes y su proyecto fin de curso.
Que me parece muy bien que el arte se saque a la calle y no en salas pijas en las que no entras ni de coña y se ocupen tantos espacios muertos y vacíos como hay en nuestras ciudades. Y que sea social y de denuncia, que no se esconda, que no se salve que entonces es que se está muriendo.
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