43.
Ratito después de que Trevor llegue a la cama y me diga que Chávez se ha muerto y yo le suelte una burrería al respecto que no va a pasar a la historia si 7 horas después ni la recuerdo.
También después de que CR meta un gol decisivo para su equipo, pida perdón al mundo y casi llore y Mou, ya más personaje que persona, más guiñol que hombre, diga que perdió el mejor, que no era su equipo. Cuánta deslealtad o ¿es lo contrario y es que ellos a quien deben lealtad es al otro equipo? Qué fácil resulta últimamente defender esto y también lo contrario. Ahora que vivimos en un mundo de "esta es mi verdad" todo vale. "Esta es mi verdad", oyes decir a la gente "Y PUNTO". Nunca fue más grande y más en mayúsculas ni mejor venido ese "y punto" porque no hay turno de réplica que valga. ¿Desde cuándo la verdad es múltiple y subjetiva? Desde ya (¿o es desde siempre y yo no me entero de nada?)
Días después de que me mude a una casa que es la casa de mis sueños, aunque de momento me lo esté quitanto. Y es el número 43, como los años que cumplo. Tiene que ser por algo. No hay coincidencias que valgan. Tenía que ser así y ahora: las cosas pasan cuando tienen que pasar. (Cuánta fruslería, por dios)
El mismo día que mi hermana empieza su trabajo nuevo. Tan perfecto, tan bonito: ludoteca, de 8 a 2, de lunes a viernes, dada de alta. ¿No es perfecto? 600€ brutos todo prorrateado. Y me toca consolarla, porque es lo que tengo que hacer y lo que ella tiene que aceptar. Que aún así tiene suerte.
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