Como de costumbre, no me había preparado el viaje. No más allá de esos squats de abajo. Lo demás lo dejé para el azar. A mitad reparto el debido arrepentimiento y la fe ciega que tengo a dejarme llevar y encontrar por mi misma. No hay mayor satisfacción que la de lo inesperado.
En París, una ciudad que apabulla por inmensa y desmedida, por soberbia, tienes que perderte para encontrar la vida.
En las que me perdía, me fui encontrado esto:
|
Vi más mendigos que nunca. La gente me pareció más irascible que nunca:
¿tiempos de crisis?
Por esto se perdonan pecados
Había gente importante esperando para entrar
¿enfocamos? enfocamos
pray the holy trinity: £, $, €
|
es París
|
Eso obviamente no fue callejeando. De mi primera visita al Louvre, lo mejor. Mi descubrimiento de la escultura. Puedes notar el viento en sus piernas, en su túnica. Puedes distinguir su carne debajo de la tela. La Victoria de Samotracia. la Bella. |
Curra! your viaje looks absolutely wonderful! La verdad es que me encanta la manera en que viajas-- mis mejores recuerdos de Marruecos son contigo :)
ResponderEliminarsí, estuvo bien, a pesar de la lluvia y el taxista...besos
ResponderEliminarCari cada vez que te vayas para allá te voy a decir:"Ya te vas otra vez(sin mí, sniff) a los Parises". Y es que como tu muy bien me has dicho alguna vez son muchas ciudades maravillosas en una que te invitan a innumerables viajes¡Y menos mal que no lo llevabas programado!
ResponderEliminarhoni, ni idea tienes de lo que me acordé de ti. verlo contigo sería como ir por primera vez...y ya dichas tantas ñoñadas, me retiro a descansar.
ResponderEliminartuya, que te quiere,
carmencurra