qué hago, a quién conjuro para no soñar, quién tiene la vela que me la pueda encender
hoy soñe contigo y estabas tan guapo que tuve que volver a quererte (en mi sueño, al menos)
ayer tropecé en una piedra vieja conocida, y por la noche se convocaron todas las piedras que cabían dentro de mis zapatos de cordones
sonó el despertador y yo no quería dormir, ni levantarme, ni saber qué hacer sabía.
hasta creo que mi mirabas como si tú me quisieras, o me hubieras querido alguna vez, ¿quién se equivocaba, tú al mirar o yo al creer?
No hay comentarios:
Publicar un comentario