De camino a Conquista, me paré en Córdoba varias horas decidida a hacer de guiri en una ciudad que es la mía según papeles.
El paseo de 2 horas largas fue perfecto: conseguí sentirme cómoda, imposiblemente cómoda: pasaba sin ser vista pero podía verlo todo. Paseé calles que no recuerdo haber visto nunca. Doblé esquinas:
el Banksy cordobés: había más. me di cuenta tarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario